Seguridad del juguete
La certificación de juguetes importados y nacionales en Brasil es uno de los modelos de certificación existentes, siendo una actividad obligatoria (obligatoria), que se basa en la norma brasileña NBR 11786 - Seguridad de los juguetes, publicada por la Asociación Brasileña de Normas Técnicas (ABNT) y regulado por Portaria Inmetro nº 177, del 30 de noviembre de 1998. Esta norma, que trata de la seguridad de los juguetes, se refiere a posibles riesgos que, incluso si no son identificados por el público, pueden surgir durante el uso normal de los juguetes o incluso como resultado de un abuso razonablemente previsible.
La razón más importante para la certificación obligatoria de juguetes es el reconocimiento de la necesidad de garantizar la seguridad y la preservación de la vida humana en el momento del uso.
La certificación de juguetes, así como de otros productos certificados, es realizada por organismos acreditados por Inmetro, en base a pruebas realizadas, de la misma manera, en laboratorios acreditados por Inmetro.
Las pruebas, realizadas en laboratorios definidos según el tipo de juguete, se basan en la composición de los materiales constituyentes y también en la intención y la forma de uso del juguete por parte de los niños. Después de la aprobación del juguete en todas las pruebas a las que se presenta, se otorgan el Certificado de Confomidad y la licencia para el uso de la Marca de Conformidad, que demuestran al consumidor que el producto cumple con los requisitos de seguridad contemplados en NBR 11786. NBR 11786 - SEGURIDAD EN LOS JUGUETES Existe una gran preocupación relacionada con el mal uso de la Marca de conformidad y la no utilización de la misma, ya que en el mercado se pueden encontrar varios productos con sellos falsificados o sin sellar, principalmente en el comercio informal, que puede poner en riesgo el consumidores de estos productos.
NORMAS Y DOCUMENTOS DE REFERENCIA 11.786 / 98 - Norma brasileña para la seguridad de los juguetes. Ley N ° 8.078, del 11 de septiembre de 1990, del Ministerio de Justicia (Código de Protección y Defensa del Consumidor). Pruebas previstas en la norma técnica NBR 11786 / 98 - Seguridad de los juguetes.
1. Etiquetado, literatura y marcado Todo el etiquetado, literatura y marcado que se relacione con la seguridad del juguete, la forma en que se maneja y el rango de edad para el que está destinado, deben escribirse de manera clara, ostentosa y en portugués. Entre los artículos más importantes, destacamos:
Identificación del fabricante: el juguete debe contener el nombre o la marca del fabricante de forma legible y permanente. Además, el embalaje debe proporcionar al consumidor la dirección completa del fabricante o importador;
Juguetes que requieren un etiquetado de advertencia especial: Ciertos juguetes y embalajes deben tener un etiquetado de advertencia especial, necesariamente en portugués. Algunos juguetes deben contener, en la etiqueta principal del producto, las palabras "PRECAUCIÓN" o "ATENCIÓN", además de la indicación de los riesgos que presentan, impresos en un color contrastante y resaltados por otros dichos y dibujos;
Etiquetado de juguetes para niños de hasta 3 años: los juguetes que puedan presentar riesgos para niños de hasta 3 años deben llevar la siguiente advertencia de manera legible:
1. "NO SE RECOMIENDA PARA NIÑOS MENORES DE 3 AÑOS";
2. La mención del riesgo involucrado;
3. El símbolo de advertencia para juguetes no aptos para niños menores de 3 años:
Grapas en el embalaje: los paquetes que contienen grapas y que los niños pueden abrir no pueden formar esquinas o puntas afiladas. Si están expuestos al abrirlos, deben contener la siguiente advertencia:
"ADVERTENCIA: EL PAQUETE CONTIENE ABRAZADERAS - RETIRE ANTES DE ENTREGAR EL JUGUETE AL NIÑO"
2. Toxicología Las sustancias que se sabe que son peligrosas para la salud no deben usarse en una cantidad o forma que pueda afectar a los niños. Por lo tanto, el estándar establece los valores máximos de estos elementos químicos, como se muestra en la tabla a continuación:
Elemento
Concentración máxima (mg / kg)
Antimonio -60
Arsénico -25
Bario -1000
Cadmio -75
Plomo -90
Chrome -60
Mercurio -60
Selenio -500
Estas sustancias generalmente se denominan "metales pesados". Son elementos que no existen naturalmente en ningún organismo, ni desempeñan funciones, nutricionales o bioquímicas, en microorganismos, plantas o animales, es decir, la presencia de estos metales en organismos vivos es perjudicial en concentraciones superiores al límite máximo permitido por la legislación pertinente.
El plomo, por ejemplo, contamina principalmente el sistema nervioso, la médula ósea y los riñones. La presencia de este elemento en el cuerpo interfiere con los procesos genéticos o cromosómicos y produce cambios en la estabilidad de la cromatina en cobayas, inhibiendo la reparación del ADN y actuando como carcinógeno.
Los compuestos de cromo, a su vez, producen reacciones cutáneas, nasales, broncopulmonares, renales, gastrointestinales y cancerígenas. Los cutáneos se caracterizan por irritación en el dorso de las manos y los dedos, y pueden convertirse en úlceras. Las lesiones nasales comienzan con una afección inflamatoria irritante, supuración y formación de costras. A nivel broncopulmonar y gastrointestinal, producen irritación bronquial, función respiratoria alterada y úlceras gastroduodenales.
3. Prueba de abuso razonablemente predecible Esta prueba tiene como objetivo simular la exposición de un juguete a daños mecánicos debido a caídas o lanzamientos, además de otras acciones que un niño puede realizar. Después de ser sometido a las pruebas correspondientes, el juguete no debe tener esquinas afiladas y puntas afiladas, ni riesgo de liberar pequeños fragmentos y componentes que los niños puedan tragar.
4. Prueba de caída Todos los juguetes deben someterse a esta prueba, que consiste en dejarlos caer desde alturas que varían según el rango de edad para el que están destinados. Es una simulación de situaciones que pueden ocurrir cuando un juguete se cae de una cuna, una mesa u otras situaciones en las que tiene un impacto. Después de la prueba, no debe haber bordes afilados, esquinas afiladas u objetos en riesgo de ser tragados.
5. Objetos pequeños, puntas y proyecciones peligrosas Los requisitos para objetos de esta naturaleza tienen como objetivo minimizar los riesgos relacionados con la ingestión o inhalación de piezas que se rompen o se retiran de los juguetes, además de eliminar los riesgos relacionados con la forma del juguete y los elementos utilizados en el ensamblaje, tales como alambres, alfileres, clavos y grapas, incorrectamente fijados.
Las puntas afiladas y las proyecciones pueden quedar expuestas durante el uso normal o como resultado de un abuso razonablemente previsible. Estas pruebas también verifican los riesgos de lesiones que podrían ser causadas por la caída de un niño sobre puntos sobresalientes.
Estos juguetes, adecuados para niños mayores de 3 años, deben contener el símbolo de advertencia para niños menores de 3 años y la siguiente advertencia:
"ATENCIÓN: NO SE RECOMIENDA PARA NIÑOS MENORES DE 3 AÑOS POR CONTENER PIEZAS PEQUEÑAS QUE SE PUEDAN INGERIR".
6. Pruebas de torsión y tracción para retirar componentes Estas pruebas se realizan cada vez que un juguete tiene una protuberancia, una pieza o un conjunto de piezas que el niño puede levantar con las manos o la boca. El juguete debe ser reparado de tal manera que sea posible someter sus partes a esfuerzos de tracción y torsión. Todas las partes probadas deben permanecer intactas después de la prueba.
Específicamente para el cochecito Toy, se llevaron a cabo pruebas de inaccesibilidad de mecanismos y tracción en neumáticos, ruedas, ejes y juegos de ejes. Al igual que con las pruebas anteriores, estas últimas tienen como objetivo detectar partes que presenten un riesgo de causar cortes, pinchazos o ser tragado. En la prueba de inaccesibilidad de los mecanismos, es posible que un niño inserte un dedo en partes que pueden causar lesiones.
7. Cuerdas y gomas elásticas Los juguetes que contienen cuerdas y gomas elásticas, destinados a niños mayores de 3 años, deben tener en su embalaje el símbolo de advertencia para juguetes no aptos para niños menores de 3 años y la siguiente advertencia:
"ATENCIÓN: NO SE RECOMIENDA PARA NIÑOS MENORES DE 3 AÑOS POR CONTENER UN CORDÓN LARGO, QUE PUEDEN TEJER"
Estos requisitos apuntan a minimizar los riesgos que pueden causar estos materiales.
8. Pruebas de mordedura Los juguetes tipo diente se hacen para llevarlos con frecuencia a la boca. Por lo tanto, deben verificarse la posibilidad de ser tragados o causar cualquier tipo de molestia en el niño. Los agujeros existentes deben diseñarse de manera que no exista riesgo de atrapar los dedos del niño y bloquear la circulación sanguínea.
La siguiente recomendación debe aparecer en el embalaje de este tipo de juguete:
"Se recomienda poner agua hirviendo".
INFORMACIÓN DEL CONSUMIDOR
El consumidor, al comprar un juguete, debe verificar la presencia del sello Inmetro y respetar la recomendación del grupo de edad para el que está destinado el producto. Además, debe evitar comprar juguetes en el mercado informal, el principal destino de productos falsificados y de contrabando, que no tienen garantía de calidad y ponen en peligro la seguridad y la salud de los niños.
Para el uso correcto y seguro de los juguetes, es importante leer cuidadosamente las instrucciones en el empaque y, en caso de duda, contactar al fabricante.
Al entregar el juguete al niño, se debe retirar todo el embalaje, incluidas las grapas, gomas y piezas de seguridad.
Periódicamente, es aconsejable inspeccionar los juguetes para detectar defectos o cualquier tipo de riesgo, como piezas sueltas.
Para otros asuntos relacionados con los juguetes, acceda al Portal del Consumidor (http://www.portaldoconsumidor.com.br/).
COMENTARIOS Es importante resaltar los graves riesgos de algunas no conformidades encontradas en este análisis, como el alto contenido de plomo que se encuentra en la muñeca de plástico y la insuficiencia de los elementos estándar que verifican si los juguetes liberan objetos pequeños o exponen puntas y esquinas afiladas.
El contenido de plomo, tres veces mayor de lo permitido, expone al niño a un elemento cancerígeno y potencialmente peligroso para la salud, como ya se informó en el ítem 6.2.
Igualmente preocupantes son las no conformidades encontradas en las pruebas que verifican si los juguetes liberan objetos lo suficientemente pequeños como para ser tragados o exponen puntos afilados y esquinas afiladas, lo que aumenta el riesgo de lesiones en el uso y posibles caídas en los juguetes. Solo se consideró que la cuerda de saltar cumple con estos artículos, lo que puede causar cortes, ceguera, asfixia y, finalmente, la muerte (aunque cumple con estos artículos, otras pruebas han demostrado que este juguete no es seguro).
Las no conformidades relacionadas con la información obligatoria y la falta de símbolos y textos de advertencia no deben considerarse menos importantes, ya que son las que guían a los padres sobre el cuidado que deben tener con el embalaje y los juguetes, además de indicar el grupo de edad apropiado. Estos artículos en realidad representan el primer paso hacia el uso seguro y adecuado del producto.
Si el consumidor encuentra productos con el sello falsificado o sin el sello en el mercado formal, repórtelo al Defensor del Pueblo de Inmetro (0800 285-1818), en el caso del mercado formal y a los ayuntamientos en el caso del mercado informal.